VALERIA
Segundas primeras veces + Thanksgiving
Como muchos más esta edición, y otras ediciones, me he cambiado de familia. No se suele hablar mucho de este tema, lo que es totalmente aceptable y respetable; pero, yo quiero hablar sobre cómo ha sido el mío. Mi cambio ha sido a lo grande, de un pueblo pequeño a la capital del estado, Saint Paul. De un high school con apenas 100 estudiantes, a uno tan enorme que tengo que correr de clase a clase. Pero yo creo que mi cambio ha ido a mejor. Mi primer mes en Estados Unidos, no fue el mejor. Llevo con la nueva familia y el nuevo instituto dos semanas, y siento que han sido, literalmente, las mejores de mi vida. Osea, ahora puedo entender a la gente que reclamaba todo el tiempo, "este es el mejor año de mi vida". Parece de locos, solo han pasado dos semanas. Pero vaya dos semanas. En este high school me he apuntado a todos los clubs que podía, he encontrado a gente genial, que ya me consideran de su grupo para el lunch (e incluso hemos ido juntos a un par de sitios, y los que quedan), voy a hacer los tryout para cheerleading (¿por qué no? Sería peor si me quedo con las ganas a no intentarlo) y muchas cosas más. Con la familia he conectado (no estoy diciendo, para nada, que la otra familia sea mala, fueron amables siempre), es más, con mis dos nuevas host sisters, fue al instante. Y por ejemplo, he visitado el State Capitol, la catedral, Mall of America, Moe's (tradición de la familia), Minehaha Falls... He tenido que volver a hacer todo por una segunda vez. Primera cena con la nueva familia, primer día de instituto, primeros amigos... Me siento como una protagonista de un libro en el que siempre se repite el mismo día para tener otra oportunidad de arreglar las cosas, como en "Una semana de siete lunes" (uno de mis libros preferidos). Y justo viene para Thanksgiving. Mi nueva host family tenía planeado esto desde hace meses, y es que vinieron 8 personas más para quedarse en la casa durante Thanksgiving break; además, nos juntamos con unos amigos de la familia, así que para la cena fuimos unos ¿25? Más o menos. A mí, Thanksgiving me ha encantado. No tanto por la historia detrás de Thanksgiving, pero por cómo lo celebran. No tengo claro si en el resto de Estados Unidos lo celebran igual, pero nosotros tuvimos la cena a las 4 o 4.30, con muchísima comida: stuffing, sweet potatoes, pavo, jamón (no serrano, relax), seis tipos diferentes de pie, smashed potatoes... Total, demasiada comida. Luego de la cena, nos sentamos todos juntos en el salón y damos el speech de "I'm thankful for...", las dos reglas eran no repetir y tenías que conseguir que todos nos riésemos al menos una vez durante tu discurso. La verdad fue muy divertido, no tradicional, pero increíble; luego los adultos, se echaron una siesta (sí, en América echan siestas también), y por los niños y los adolescentes jugamos al Just Dance y al karaoke. Ahora viene lo mejor, el Black Friday había empezado. A todo esto, seguíamos en la casa de los amigos de la familia; nos fuimos a nuestra casa a eso de las 2 o así, nos cambiamos de ropa, cogimos dinero y descansamos un poco. A las 3 y media estábamos de camino al Mall of America (que es ENORME), y la cola era aún más enorme que el mall (según he visto en Internet eran unas 2500 personas, olé). Después de lo que parece una eternidad, entramos y nosotros teníamos un plan hecho para saber a qué tiendas ir y qué comprar en ellas. Bueno, eso era bestial, muchísima gente, y mi host sister casi se pelea con otra chica por el último iPad, sí, de verdad. Si os soy sincera, yo doy gracias por esta oportunidad, por poder volver a hacer todo de nuevo y por esta nueva familia. P.D.: Un día que fuimos al Mall of America me encontré a Bella Thorne, típico americano, ¿no?