Más que un deporte

En España desde que era pequeña he jugado al baloncesto. Pero hace dos años lo dejé. 

Al llegar aquí y ver cómo viven todos los deportes y la importancia que tienen me dije - ¿Por qué no? 

Llevo desde noviembre jugando al baloncesto y no puedo estar más contenta. Formo parte de un equipo lleno de chicas increíbles. Me han acogido súper bien y cuando tengo problemas entendiendo las jugadas o los términos nunca dudan en ayudarme. 

Las primeras semanas fueron duras, no voy a mentir, jugar a un deporte de equipo en otro idioma es difícil aunque no lo parezca. Tienes que estar atenta a las jugadas, los defensas, el balón, lo que te dicen las compañeras y las órdenes del entrenador. Hacer todo eso con la presión de un partido no es fácil. Pero no me rendí y, poco a poco, fui mejorando. Trabajando duro conseguí enterarme de todo. Ahora solo me tienen que repetir las cosas una vez, y ya me sé todos los términos. 

Todas mis compañeras están dando clases de español este año. Y siempre intentan decir frases o simplemente algunas palabras cuando estamos jugando. 

Nuestro grito antes de empezar los partidos es en español. Nos ponemos todas en círculo y gritamos - ¡VAMOS EQUIPO!

Llevaba mucho tiempo sin jugar a este deporte que tanto me gusta. Estar en este equipo con estas chicas me ha hecho ver lo mucho que echaba de menos el baloncesto.